Al realizar unas encuestas en Instagram de mitos comunes sobre perros y gatos, pudimos comprobar que el mito que más personas creían verdadero y el más extendido (en este caso coincidieron uno y otro) es el de que 1 año humano equivale a 7 años perrunos/gatunos.
Aunque en general todos tienen un porcentaje bastante elevado de “propagación”, por suerte el de que necesitan ser madres al menos una vez en la vida está, para nuestra sorpresa y alegría, muy poco instaurado en la mente de nuestros seguidores.
¿Por qué? ¿Para qué? Su desarrollo tanto físico como mental se completa igual tengan o no tengan camadas. Además, ellas no tienen ese sentimiento de “querer ser madres”. Esto es algo exclusivamente humano.
La esterilización temprana (antes del primer celo) previene al 99% la aparición de tumores de mama. Entre el primer y segundo celo el porcentaje se reduce a un 92%, y entre el 2° y el 3° un 74%. A partir de los 2 años de edad la castración no evita los tumores de mama (50-50%), pero sí los embarazos psicológicos, camadas no deseadas y piómetras.
En nuestra entrada del blog puedes leer más acerca de esto y de otros mitos que involucran a los veterinarios como “lo hacen para sacar dinero”, que es la que más nos gusta.
Un 74% de los usuarios lo habían escuchado alguna vez, de los cuales 1 creía que era verdad.
Esto es falso por una razón muy sencilla: Actualmente casi todos los perros nos duran 15 años, los gatos incluso más. Si multiplicamos 15×7 saldrían 112 años. ¿Cuántas personas hay que duren tanto?
Por otro lado sabemos que los perros de raza pequeña entran en edad adulta antes y duran más años que los de raza grande, que entran en edad adulta más tarde y envejecen antes. Por ejemplo, un yorkshire de 8 años se considera adulto, pero un dogo ya sería un senior.
Y los gatos por su parte, si gozan de buena salud, duran mínimo 15 años. Es decir, no hay “una regla” exacta para saber la edad de tu perro en equivalencia humana, es más bien a “ojímetro”.
Un 98% de usuarios lo habían escuchado alguna vez, de los cuales 12 creían que era verdad.
Los conos son las células responsables de la percepción del color. Los humanos tenemos 3, que perciben el rojo, verde y azul; en cambio los perros y gatos cuentan con sólo 2 fotorreceptores: el azul y el amarillo. Esto hace que haya colores que no perciban tal y como nosotros los conocemos. Por ejemplo, el verde y el rojo los ven en tonos marrones amarillentos. Además no los perciben tan vivos ni tan saturados como nosotros.
Sin embargo, no todo son desventajas, ya que tienen un mayor ángulo de visión periférica y perciben los movimientos mucho mejor que nosotros. Además, ven mejor (más nítido) en la oscuridad gracias a una membrana llamada “tapetum lucidum”, que refleja los rayos de luz antes de llegar a la retina (por este motivo sus ojos brillan en la oscuridad y en las fotos).
Un 91% de usuarios lo habían escuchado alguna vez, de los cuales 7 creían que era verdad.
Obviamente hay perros que no pueden tolerar un gato y hay gatos que no toleran perros. Pero también hay perros que no toleran otros perros, y gatos que no toleran otros gatos…
Pero en la mayoría de los casos, haciendo una presentación correcta tanto a uno y otro, o acostumbrándoles desde pequeños, está convivencia es más que posible!!
Un 87% de los usuarios lo habían escuchado alguna vez, de los cuales 5 creían que era verdad.
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